Anillos que huelen a limonada!

Anillos con base en bronce, imagen tratada con decoupage y protegida con resina.

El verano es época de juegos, bicicletas (ya lo dijo Fernando Fernán Gómez), romanticismo y locuras. Estos anillos me parece que huelen a limonada muy fría tomada junto a alguien especial y me han evocado recuerdos hermosos de veranos pasados. Y es que de adultos con nuestras muchas responsabilidades nos quejamos muy a menudo del calor sofocante, de nuestra falta de energía y de nuestras piernas hinchadas. Pero de niños disfrutábamos tantísimo, nos importaba tan poco el calor, los insectos zumbones, el tener que cuidar a nuestros hermanos pequeños o aguantar el ceño fruncido de los mayores. Suponía un tiempo en el que podíamos soñar y jugar sin horarios. 

Recuerdo en especial a una niña que venía en verano. Tocaba en el cristal de mi ventana y me mostraba su enorme caja de cromos. Entusiasmada corría a coger la mía y tras enseñarnos los cromos nuevos y de los que más orgullosas nos sentíamos, nos disponíamos a combar nuestras manos, sonreír sin parar y tener los ojos tan abiertos que la vida nos entraba tan adentro que nos mareaba de gozo. Había cromos tan bonitos que luego, si los ganabas, te pasabas una eternidad mirándolos embobada. Qué sería de aquellos cromos. A mi pesar tengo que decir que no guardé ninguno, pero, eso sí, su recuerdo jamás me abandonará. Y es este recuerdo el que me ha hecho disfrutar muchísimo más al crear estos anillos. La magia está formada por los recuerdos hermosos, pinturas de colores e imaginación. Ahora compro cromos nuevos que imitan a aquellos de mi infancia en una tienda de Murcia bellísima. En ella sus dueños tienen un enorme perro labrador tranquilo y afable que no se acerca a los clientes a no ser que los clientes quieran. He de decir que desde la primera vez que entré enseguida se dio cuenta de que yo soy de las que adoro ser "molestada" por un perrazo tan adorable, y nada más abrir la puerta viene hacia mi tambaleando sus enorme corpachón con un cuidado increíble para no tirar nada. 

Ahora muchas de vosotras estaréis de vacaciones. Seguro que tendréis algún momento de ensoñación en el que disfrutaréis recordando vuestros veranos de la niñez. Deseo que en vuestras manos se queden los más hermosos para con ellos seguir creando belleza y magia.