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miércoles, 15 de enero de 2014

Tristeza con un ramo de florecillas otoñales.

Incluso caminando con la tristeza como compañera inseparable se puede vivir un día tras otro y sentir que se convierte en una amiga no deseada, pero aceptada como inevitable desde el momento en que crecemos y antes o después perdemos a nuestros seres queridos. Al principio, cuando todavía no nos acostumbramos a esta fastidiosa amiga, nos parecerá cada mañana como si nos hubieran abandonado en un páramo yermo y solitario. Entonces a través de las lágrimas las ves, humildes florecillas entre las piedras y sabes, paradójicamente, que es a una de esas flores tan frágiles y delicadas a la que hay que agarrarse para pasar el resto del día. Así florecilla tras florecilla, prensadas entre las páginas de tu diario, acabas creando un hermoso ramo color otoño, tan humilde como tu propia persona, pero enhiesto y orgulloso por ser.

Qué difícil me resulta escribir esta entrada... Me demoro en decirlo, como si pudiera retrasar de algún modo lo que ya ocurrió. En la biografía de Hans Christian Andersen leí hace años que él que todo lo apuntaba en su diario nunca escribió sobre la muerte de su madre. Este detalle tan importante me quedó grabado y pensaba una y otra vez en sus motivos, que no debieron ser otros que los que a mí misma me han impedido hasta hoy escribirlo aquí, su enorme dolor. Sí, ya lo he dicho, ¿verdad? Mi madre nos dejó el 25 de noviembre. Lo escribo al fin y me parece irreal; lo he vivido y no me parece cierto. No resulta fácil pensar que ya no la volveré a ver y me resisto a mis propias creencias afianzadas durante tanto tiempo; me contradigo a mí misma, pues al sentirla tan cerca como la siento, me gusta pensar que en efecto sigue aquí junto a mí. Cómo podría soportarlo, sería como despertarme cada noche durante el resto de mi vida llamándola igual que una niña pequeña que ha tenido una pesadilla y quedarme sola con mi miedo y mi dolor para siempre en la más absoluta oscuridad. Cómo podría... Solo contradiciéndome a mí misma, dejándome sentir sin analizar podré soportarlo.

Fue una mujer básicamente buena. Nada de lo que hizo durante toda su vida tuvo otro fin que hacer el bien a los que la rodeaban. Se equivocara o no, su punto de partida desde la bondad más absoluta ha hecho que ahora solo los bellos recuerdos me rodeen y que olvide los dolorosos contra los que ella poco pudo hacer, no por no desearlo, no por no intentarlo, sino por esas imposibilidades de la vida que dejan a veces a las personas sin fuerzas para combatirlas. Ahora lo veo, en el pasado muchas veces mi estupidez, mi impaciencia de joven mimada me impidió darme cuenta de ello. Y ella siempre perdonó. Mi testarudez, mi egoísmo, mi impaciencia, mis reproches... Siempre perdonó sin más y pagó incomprensión por cariño. Era tan generosa que hasta mis imperfecciones las convertía en virtudes. Solo una madre puede hacer algo así. Siempre creyó en mí y yo que tantas veces la defraudaría seguramente, ahora no deseo otra cosa que darle la razón, decirle que en efecto algo tenía que decir en este mundo y que de algún modo, por ella y por mí, he de tratar de hacerlo. Lo diré a través de su nieta, manteniendo vivo su recuerdo y lo diré cuántas veces sea necesario y a quien quiera oírme. Y el querer decirlo, el quitar mordazas absurdas es su triunfo, no el mío.

Tengo una fotografía siempre en la cabeza.Vestida y peinada muy años 60, toda ella ríe. Ríe su boca y sus ojos, su postura, su naturalidad. Se la ve muy muy feliz, pues tuvo años en los que lo fue muchísimo. En su vida hubo mucho dolor, pero también alegría y felicidad. Tuvo su dulce pájaro de juventud que se le quedó entre sus manos con las alas rotas. Pero ambos volaron al final en un sueño plácido.

Descansa en paz, querida mamá, pero no permitas que nunca deje de sentirte muy cerca. Una vez más mi egoísmo, ya ves.
                                                       
Madre e hijo de Emile Munier.

40 comentarios:

  1. Una buena mujer y una mujer buena, es la mejor definición para tu madre. Y que cuando se reía se reía con todo su cuerpo, trasmitía esa alegría.
    Es difícil poder expresar con palabras el dolor de la perdida, solo el que lo vive lo sabe. Muy lindas tus palabras. Hace poco escuche lo siguiente de Jose Mujica (Presidente de Uruguay): "En la vida hay que aprender a cargar con una mochila de dolor, pero no vivir mirando la mochila. La vida hay que mirarla hacia delante, cada madrugada amanece y la vida es porvenir". Llevamos la mochila pero esperamos cada día con ilusión, manteniendo el recuerdo fresco de lo bueno mientras vamos relegando lo malo. Y no nos juzguemos porque nuestros seres queridos no lo han hecho. Un beso enorme Ana.

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    1. Gracias Charo! Te agradezco muchísimo tus sentidas palabras. Es cierto que la "mochila de dolor" es inevitable, pero hay que seguir hacia delante por los que quedan y por uno mismo. Qué acertado, Jose Mujica, "no vivir mirándola. Y esa ilusión que dices, mantenerla brillante cada día es tan importante. Respecto a juzgarnos, es inevitable, pues no somos perfectos y siempre hay fricciones que hubiéramos querido no tener. Yo me juzgo desde la satisfacción de haber ido mejorando con la edad de estar feliz por haber madurado con los años y haber sido cada día más consciente del enorme amor que sentía y que podía con todo lo demás.

      Un beso enorme para ti, querida amiga!!

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  2. Mi querida Minomalice, Ana,
    Permíteme acercarme a ti y a tu compañera y darte un beso y un abrazo grande y sincero.
    Me alegra saber que la sientes cerca...quizá hasta te sueñes con ella más adelante. Y estoy convencida de que es una gran mujer (sigue siéndolo, porque su rastro de bondad ha quedado reflejado...de eso estoy convencida)
    Es una entrada preciosa, con tanto amor y delicadeza que no quiero decir mucho más...
    ¿Sabes? Utilicé hace un tiempo la misma imagen para una futura mamá muy joven que desgraciadamente no había conocido el amor de su madre.

    Estoy convencida de que estará siempre cerca...
    Un beso muy muy grande arropado de muchísimo Amor...

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    1. Querida María, gracias por tu cariño. Me ha emocionado especialmente ese presente que utilizas respecto a ella. Ese pasado que se impone es de lo más duro y de algún modo necesitas que siga habiendo un presente. Una prima me dijo que siempre la sentiría y me agarré a ello con desesperación, pero temiendo cada día que desapareciera esta sensación. No lo ha hecho y deseo con toda mi alma que continúe siempre.

      Soy un poco ingenua en mi alegría cuando coincidimos -que nos ocurre a menudo-, pero no me importa, me encanta. Esta vez con esta imagen tan bella. He de abrir una nueva sección en mi diario, "coincidencias adorables con María y otras personas encantadoras y bellas"

      Gracias una vez más por tu cariño. Un beso enorme para ti también.

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  3. Querida amiga,en estos momentos las palabras sobran pero creo que si te puede consolar sentirte acompañada en tu dolor.
    Hace muy poquito hice una entrada dedicada a mi madre y también utilicé imágenes de Munier...representan como nadie el amor de una madre .No dudes que ella está ahora más cerca que nunca de tí.
    Un Beso con todo mi cariño

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    1. Querida Princesa, hay un momento en el que nada parece consolar, pero después estando el dolor todavía muy presente, aunque ya más sereno, agradeces enormemente hermosas palabras de personas que sabes poseen una gran sensibilidad, como es tu caso.

      Y te digo como a María, es maravilloso coincidir con personas como vosotras, en esta ocasión con las imágenes de Munier. Cuando pensé en una imagen no tuve dudas, pues para este pintor sus hijos fueron su inspiración y supo reflejarlo a través de sus cuadros.

      Un beso grande y te deseo lo mejor para este año!!

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  4. Ana siento mucho tu perdida...creo que escribir sobre ello te hará sentir un poquito mejor, no te la va a devolver, pero al menos esta bonito texto escrito desde el corazón, sirve para hacerle un pequeño homenaje , a veces cuando los seres queridos nos dejan es cuando realmente somos conscientes de cuan importantes eran para nosotros...
    Ella vivirá a través de ti cada vez que la nombres...y haz que tu hija la recuerde para que los hijos de sus hijos también puedan hacerlo...
    Un abrazo.

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    1. Gracias Julia, me reconfortan tus palabras y sí, como dices, escribir me ayuda. Es cierto que al principio me era imposible. En varias ocasiones lo he intentado y me derrumbaba, pero sentía el deseo de hacerle un pequeño homenaje y no podía dejar de hacerlo a través de este blog que tantas satisfacciones me ha dado.

      Mi hija era su única nieta y fue para ella motivo de muchísima alegría. Siempre le hablo de su abuela y lo seguiré haciendo, para que se sienta afortunada de haberla tenido y le parezca que alguien vela por ella.

      Un besazo y gracias una vez más por tus palabras!!

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  5. Mi Ana, después de tanto tiempo volver a leerte y no saber qué decirte...nada puedo decir sobre tu madre, sólo que no me cabe duda que cada vez que hables de ella con tu hija y con quien desees, ella seguirá presente contigo y en ese relato.
    Te envío mi abrazo y mi cariño.

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    1. Gracias Yeka! Desde el principio supe que eras una persona especial y agradezco enormemente las palabras que me dedicas. Al mundo le sientan bien las personas como tú. Es lo que hace que cada día se te renueve la confianza en ese mundo que a veces parece tan feo y buscando las florecillas como tú se embellece.

      Un besazo para ti y gracias una vez más!

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  6. Oh Ana, que tristeza más grande!!!!
    Es una pérdida demasiado importante como para que no te afecte; menos mal que siempre quedará el recuerdo.
    Por el camino de la vida vamos dejando atrás personas imprescindibles para el día a día y tenemos que saber afrontarlo de la manera más soportable.
    Besos guapa y aunque ahora te parezcan palabras vacías, con el pasar del tiempo y verás que el dolor se suaviza, aunque por supuesto nunca se olvida.

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    1. Gracias Herminia! Agradezco muchísimo tus palabras. Es el consuelo que queda, saber que el tiempo todo lo suaviza, aunque siempre estará esa añoranza y momentos bajos de sentirlo especialmente.

      Un besazo!

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  7. Querida Ana, cuánto lo siento! Le has hecho un homenaje precioso a tu madre, que debió ser (y sigue siendo a través de ti) una gran mujer, buena, fuerte, alegre y con mucha vitalidad. No dudes que seguirá cerca de ti, de tu hija y de las personas que la querían.
    Te envío un abrazo muy fuerte.

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    1. Gracias Silvia. Necesitaba hacérselo, porque, en efecto, fue una gran mujer, especialmente bondadosa. Como dices, seguirá cerca, por desde luego así la sentimos.

      Un abrazo fuerte para ti también.

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  8. Has hecho una entrada de lo más emotiva, un homenaje precioso para tu madre. Seguro que desde ahí arriba se está sintiendo muy orgullosa con tus palabras y va a estar cuidandote y escuchandote siempre
    Muchos besos

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    1. Muchas gracias por tus palabras. Ojalá de veras se sienta orgullosa. En vida siempre me lo demostró. Yo también me siento orgullosa de ella.

      Un besazo enorme.

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  9. Cuánto lo siento, Ana, desde aquí un apretado abrazo en este momento. Comprendo perfectamente todo lo que sentís. Hermosas y muy emotivas palabras para tu madre.
    Un beso,
    Sandra

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  10. Gracias Sandra. Agradezco enormemente tus palabras sentidas.

    Un beso.

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  11. Son pocas las cosas que se pueden decir en estos casos, escasas las palabras que me salen. Me iré por las ramas agradeciéndote en primer término este acto compartido, hermoso y sobre todo emocionante, hasta el punto de sentir un estremecimiento y esas ganas de soltar alguna lágrima. No puedo decir que sepa lo que es, doy gracias y de momento solo me intento poner en el lugar. Gracias, gracias por esto.
    Una madre lo sabe todo y sabe de ti y seguro no te deja sola. Ni hoy, ni nunca, ni jamás.
    Preciosa, no puedo decir más que eso, la bondad que destilaba y la que salió de ti en estas letras.
    Un abrazo y mucho cariño

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    1. Marilú, muchas gracias por tus palabras. He tratado de hacerle un pequeño homenaje y escribir exactamente lo que siento. Está siendo muy duro, pero poco a poco estoy algo más fuerte. De veras que la siento cerca, pero al mismo tiempo no la tengo y la añoranza es terrible.

      Un besazo enorme.

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  12. Hola
    Vengo del blog Pirncesa Nadie porque me gustó mucho el mensaje que le dejaste y me encuentro con un tema tan delicado, tan humano.

    A mí también me llega muy de cerca, mi mamá partió hace 10 años pero yo siento que fue ayer, mas tiempo pasa más la extraño porque pienso que como ella nadie, nadie.. te podrá querer.

    Ese amor es único e irrepetible. Ellas nos han marcado un camino con su ejemplo, con sus virtudes y defectos, con el amor que nos dieron incondicional. Estoy segura que estaba orgullosa de ti aunque te rebelaras como lo hacía yo. Cuando se van es como que te quedan sin ese abrigo, sin esa persona que te cuida, dejas de ser hija, niña... para pasar a ser una mujer algo huérfana. Por lo menos es lo que siento yo.

    Tu mamá será siempre tu guía y hablar de ella hace bien. A mí me gusta recordarla en mi blog siempre como lo hago desde que me levanto hasta que me duermo.

    Me quedo en este cálido blog, los amigos de Princesa también son los míos, la quiero mucho a ella.

    Te dejo mi dirección de blog principal porque tengo otros pero en este estoy siempre.

    lujanfraix.blogspot.com

    Un beso.

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    1. Luján, bienvenida. El blog de Princesa Nadie fue de los primeros que comencé a seguir y siempre que puedo allí estoy para hacerle una visita y ver cómo sigue, que este año, como sabes, ha sido muy duro también para ella.

      Tus palabras han sido preciosas y me he sentido muy identificada. Es imposible que una madre no nos marque para siempre. Cuando ésta ha sido bondadosa es un tesoro lo que te deja, pero también es más dura su pérdida. Me parece muy certero lo que dices sobre que dejas de ser hija, niña... Me siento como si en dos meses hubiera madurado años de golpe.

      Qué bonito que le dediques unas palabras en tu blog, te honra a ti y a ella. Y el recordarla cada día... Yo le hablo, si me oyen dirán que no estoy bien, pero la siento tanto que no puedo evitar dirigirme a ella y contarle de mi dolor y decirle de su querida nieta. Ay, es muy duro, pero al mismo tiempo esa sensación que tengo de tenerla cerca me alivia un poco.

      Gracias de nuevo, Luján. Las palabras que son tan importantes para mí las valoro extraordinariamente cuando buscan el darle, aun en la distancia, un mínimo de alivio a alguien que está sufriendo.

      Te voy a visitar sin duda y lo mismo te digo, los amigos de Princesa también son los míos.

      Besos.

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  13. Ana cariño, con las lagrimas saltadas estoy. Que hermoso y sentimental todo lo que has escrito sobre tu madre,lo siento muchísimo bonita.¡ No sabes cómo! Porque estos dos meses pasados, he tenido que dar el pésame a varias amigas , precisamente por el fallecimiento de sus madres y poco a poco se me viene a la mente que a mí algún día también me tocará, pero me resisto a pensar en ello. Es como si a mi no me fuera a pasar, no se si me entiendes. Se que en el fondo no se van del todo, su recuerdo, palabras, gestos....quedan muy dentro de nosotros, pero ese saber que aunque mas o menos malita está ahí y puedo verla es lo que no se como se podrá afrontar. Te mando todo mi cariño y con el deseo de seguir compartiendo contigo no solo las alegrías, sino también las tristezas.
    Besos

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  14. Marisa, muchísimas gracias por tus palabras, Te entiendo muy bien cuando dices que no quieres pensar en ello. Yo la veía ya muy malita y muy mayor y aun así ahogaba la voz que dentro me decía que no transcurriría mucho tiempo. Ella, pobrecita mía, incluso lo deseaba, pues estaba muy cansada de luchar. Lo único que la aliviaba era tener cerca a sus familiares y a su nietecita. Y también lo creyente que ha sido siempre le daba fuerza. No lo pienses, Marisa, solo disfruta de ella y dale muchísimos besos que luego parece que te han quedado tantísimos por darle y quieres en la despedida dárselos todos.

    Gracias de veras por venir. Tengo mucho dolor, pero me gusta mucho hablar de ella. Un besazo.

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  15. Hola acá estoy de vuelta, me alegra de alguna manera que te hayas sentido bien con las humildes palabras que he escrito con el corazón, pues cuando se trata de la partida de una madre allí estoy yo siempre.

    De alguna manera puedo compartir ese mismo sentir,
    dicen que sólo conoce el dolor quien a padecido lo mismo.

    Pues yo puedo comprender y desde mi lejano lugar, a la distancia pero cerca, como digo siempre, dar una palabra sencilla tal vez, pero sincera.

    Tú hace poco que has perdido a tu mamá y te comprendo, yo hace 10 años pero como no tengo hijos ni hermanos... se me hace más difícil.

    Gracias por venir a mi blog, te espero cuando quieras y puedas. Amo los animales, especialmente los gatos me gustan mucho. Este año perdí a Millie y sufrí muchisimo pero ahora tengo a Suri porque no podía vivir sin mascota.

    Un beso grande y gracias nuevamente por leer algo de lo que con mucha vocación y amor escribo.

    Princesa ha sido una de mis primeras amigas, hace ya 4 años; he aprendido mucho con ella. Le deseo lo mejor como a ti por supuesto.

    Besos

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    1. Luján, desde luego será un placer visitarte a partir de ahora. Tu blog,como te dije, es precioso y hay mucho sentimiento en él. Y, además, encuentro que tenemos mucho en común. Me ha gustado muco lo que dices de que no podías vivir sin mascota. A mí me sucede igual. Sufres tanto con su pérdida que siempre digo que no volveré a tener más animales, pero luego me ocurre igual que a ti, los necesito, me aportan tantísimo.

      Te mando un besazo también y estaré atenta a tus nuevas entradas!!! Hasta pronto!

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  16. Querida Ana,
    estaba deseando volver a leerte y cuando lo he hecho ha sido para acompañarte en este momento tan triste. Te escribo y créeme que lo hago confundiendo un poco las letras del teclado.
    No voy a poder encontrar palabras que puedan expresarte lo muchísimo que lo siento. Solo de imaginar lo que debe sentirse al perder una madre se me encoge el corazón.
    Lo que le has escrito es un precioso homenaje y estoy segura de que ella también habrá recibido estas palabras.

    No te preocupes por que ella te acompañará siempre, mantenla viva en tu recuerdo tal y como aparecía en aquella fotografía. Toda risas y feliz.
    Te mando un abrazo muy grande y muchísimos ánimos Ana. De verdad que lo siento.

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    1. Gracias Marie. De veras que me emociona que personas como tú me visitéis para darme unas palabras de ánimo. Os admiro sin conoceros y ahora todavía os tengo en mayor estima por vuestra sensibilidad. El mundo de los blogs tiene estas bonitas experiencias.

      La lectura una vez más viene en mi ayuda y el leerte a ti y a otras personas que aman los libros me ayuda muchísimo.

      Gracias Marie, de nuevo, por el detalle que has tenido conmigo. Un besazo enorme!

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  17. ¡Muchísimas Gracias!
    Deseo que te encuentres más fuerte y animada , yo te envio mi cariño
    Muchos Besos

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    1. Gracias Princesa! Algo mejor, pero con un poso de tristeza que imagino tardará en irse.

      Un besazo enorme!

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  18. Sentidas palabras me dejan sin mas que decirte!

    Saludos!

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    1. Gracias por tu visita. A veces el dolor desarma y no se sabe qué decir. Cuántas veces me habrá sucedido a mí!

      Besos.

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  19. Lamento mucho tu pérdida.
    A menudo para los que nos quedamos aquí resulta mucho más duro al pensar en todo lo que no se dijo o no se hizo. O peor, en todos esos detalles feos que hacen pensar "fui una egoísta. No debí tratarle así". No es bueno pensar así. De las personas que se van nos queda su amor incondicional y todo lo que nos enseñaron en la vida, y de lo que deberíamos estar seguros es que ellos nunca se quedaron con lo malo.

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    1. Gracias Renaissance, valoro mucho tus palabras y tus condolencias. Tienes toda la razón, ella seguro que no se quedó con lo malo, nunca lo hacía, era de una generosidad abrumadora. Es inevitable que se queden palabras por decir, abrazos y besos por dar. Y la vida y las prisas nos absorbe demasiado y no nos paramos a decirle a los demás cuántos les queremos todo lo que deberíamos. Aunque dura la estancia en el hospital nos sirvió para hablar mucho y con ello me quedo.

      Un beso.

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  20. Hola querida amiga
    Vine a saludarte y a desearte un feliz miércoles. Estoy de descanso en mi blog pero ya abriré los comentarios otra vez. Te dejo un beso grande.

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    1. Querida Luján, gracias por pensar en mi en este descanso que te estás tomando. Aprovéchalo haciendo lo que más te guste, estando con tu misino y tus seres queridos.

      Pasé a visitarte y me sorprendió lo de los mensajes, ahora lo entiendo. Sí, a veces que no puedo venir debía hacer los mismo, para que no parezca una descortesía el no contestar, como me ha ocurrido esta vez, que todavía estoy que me cuesta recuperar mi rutina habitual y he estado un tiempo sin actualizar este blog que tantas satisfacciones me da.

      Un beso grande para ti también.

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  21. De veras me quedo sin palabras, nada de lo que pueda escribir acá disminuirá tu sentir.. solo puedo decirte que todo lo que querias que supiera, aquello que nunca le dijiste ella lo sabe ya.. desde donde está, te guiará por siempre, en cada cosa que te recuerde.. en cada detalle que evoque su imagen, ella estará dandote fuerza y valor para enfrentar este mundo, hasta el dia en que porfin puedas ir y darle un abrazo y no separarse jamás.. Te acompaño en tu dolor, entiendo como te sientes.. y sin haber pasado por lo mismo, el solo hecho de imaginarlo se me eriza la piel y se me van las palabras.. Besos amiga, y un abrazo bien grande y largo que llegue hasta donde estas.
    Maika

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  22. Gracias Maikita. Agradezco muchísimo tus palabras, que como siempre transmiten una gran dulzura y empatía, pero en esta ocasión de un modo especial. Al principio es verdad que nada de lo que me dijeran me hacía sentirme mejor, pero poco a poco he agradecido muchísimo las palabras sentidas y dedicadas a animarme un poco dentro de lo que cabe. Su generosidad y su amor siempre los tendré y ojalá en efecto algún día pueda abrazarla de nuevo y decirle cuánto la quería, cuánto la quiero.

    Un beso, linda Maika.

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  23. Siento mucho la pérdida de tu madre, Ana! Animos en estos momentos!

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  24. Gracias Marisol. Disculpa por no darte las gracias antes, pero no había visto tu mensaje de esta entrada.

    Un abrazo.

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