Aries.

Dibujo propio, hecho a mano y pintado con acuarelas. 

Como ya os dije proseguiría mi serie de dibujos sobre los distintos horóscopos. Hoy os presento Aries. En realidad este fue el primero que hice, por llevar un orden, pero luego he ido haciendo según se me iban ocurriendo. Este lo he utilizado en otro tipo de colgante. El modelo es el mismo que ya he utilizado otras veces, pero como anillo y sin la cinta. Como lleva unos agujeritos me pareció que se podía quedar mono rodeándolo con la cinta pasándola por dichos agujeros y al terminar hacerle un lacito. Espero que os guste. Es en marrón oscuro, pero no tanto como se ve en la imagen. Como siempre la fotografía es malísima. Vista en la mano la imagen se ve muy bien, aun siendo la base de 18x25mm. Se ven nítidos los ojos y todos los detalles. Afortunadamente he encontrado en un pueblo cercano al mío a una muchacha que me hace las copias tal y como quería. En los lugares donde había ido hasta ahora me sacaban buenas copias, pero cuando las imágenes eran muy pequeñas los ojos u otros detalles chiquitos no se apreciaban del todo nítidos. Como podéis imaginar, estoy muy contenta. Aunque, claro, sigo batallando con mi vieja cámara de fotografías. Esto sí que no tiene arreglo por ahora. 

Colgante en bronce, adornado con cinta en marrón con lunares blancos. La cadena es en negro. La imagen está protegida con resina.

La fotografía está hecha sobre un libro bellísimo, Diccionario de literatura para esnobs, publicado en una de mis editoriales preferidas, estoy segura de que os he hablado muchas veces de ella: IMPEDIMENTA. Este libro es en tapa dura, al contrario que la mayoría de sus libros, y lleva numerosas ilustraciones de Sara Morante, que es, como podéis ver por la portada, una artista extraordinaria. Os propongo que intentéis reconocer a los artistas de la portada. Estoy segura de que acertaréis con más de uno.

Es, como podéis imaginar, un diccionario bastante atípico. Van apareciendo en cada una de sus letras los más diversos artistas: malditos, extravagantes, suicidas, de vidas sugestivas; grupos literarios, cafés, espías... En cada uno se nos da una breve nota, atrayente e irónica que nos sorprende y nos impele a seguir buscando excentricidades y excéntricos de todos los tiempos. 

No es un libro para leer de un tirón, es para consulta. Consultas para los fanáticos de la singularidad y el arte en sus muy diversas formas. Es para leer en una soleada terraza con un cóctel y unas gafas negras de los años cuarenta. Elegante, sofisticada y, claro, un poco esnob.